CONVERSATORIOS A CIELO ABIERTO EN LA UT

El pasado el 30 de septiembre se convocó a la comunidad universitaria de la UT a fin de inaugurar el espacio plural de deliberación pública, denominado “Conversatorios a Cielo Abierto: Universidad y sociedad”, el cual desarrolló, en su primera sesión de trabajo, el tema “la responsabilidad ética de la Universidad del Tolima frente a la minería de alto impacto en la región, el caso del proyecto de la mina a cielo abierto La Colosa”. En este sentido, los participantes del Conversatorio apoyaron de manera la iniciativa de producir un comunicado público sobre su posición frente a este megaproyecto, cuyas conclusiones resumimos así:

1. Apoyar o estimular las iniciativas de movilización social que se opongan, de manera pacífica y con conocimiento de causa, a la ejecución del proyecto minero de La Colosa.

2. Poner el conocimiento técnico y científico de la UT al servicio de los movimientos sociales que se han manifestado contra estas formas insostenibles de minería.

3. Dado que las directivas de la UT han pactado de manera inconsulta una alianza estratégica con la Anglogold Ashanti (especialmente coordinada y validada por el director de investigaciones) para adelantar el monitoreo ambiental de la zona de exploración de La Colosa, entre otros objetos contractuales, se concertó tomar las siguientes medidas:

· En vista de que la UT tiene por función esencial contribuir a la comprensión crítica de las realidades que podrían afectar el bienestar social de la región, y dado que los riesgos ambientales, sociales y económicos implicados en el proyecto minero equivaldrían a los mismos riesgos que generaría el desarrollo de investigaciones irresponsables, como por ejemplo el diseño de armas biológicas o químicas, se decidió desaprobar activamente y no participar en ningún proceso de monitoreo ambiental de la exploración minera.

· Dada la evidencia científica disponible sobre el impacto ambiental de la minería a cielo abierto en ecosistemas frágiles o estratégicos (como es el caso de La Colosa, y como lo demuestran las directivas bien fundadas de la Unión Europea sobre la prohibición de la minería a cielo abierto), que por lo menos debería ser estimada por la oficina de investigaciones de la UT, se concluyó que no existe ninguna justificación ética ante la posibilidad de monitorear el proyecto de exploración minera, en tanto que sus impactos negativos serían imposibles de restaurar, mitigar o compensar.

· No obstante lo anterior, y con conocimiento previo de que existen ya profesores y estudiantes de la UT implicados en procesos de investigación financiados por Anglogold Ashanti, cuya lamentable característica es la ausencia total de una conciencia ambiental (o el trabajo científico sin límites éticos), se decidió de manera concertada reprobar sus acciones validadoras del proyecto minero (lo que pasará por denuncias públicas), y observar permanentemente sus actuaciones técnico-científicas al interior de la UT, a fin de constatar ante la comunidad universitaria y la opinión pública sobre la imposibilidad de realizar una verdadera restauración y compensación ambiental de la zona de influencia tanto de la exploración como de la explotación minera.

4. Finalmente, se cuestionó la función deliberadamente eficientista y empresarialista de la dirección de investigaciones de la UT, cuya prioridad se ha convertido en la gestión irreflexiva y sin miramientos éticos de recursos económicos, como es el caso que configura la Anglogold Ashanti.

Conversatorio a Cielo Abierto: Universidad y sociedad.

POSDATA: EL próximo encuentro de los Conversatorios a Cielo Abierto en la Unitolima, será este jueves 6:30 pm del 28 de octubre de 2010 en el Bloque 31 B del IDEAD. La temática a socializar es MARCHA PATRIOTICA. Entrada Libre y Gratuita.

Publicar un comentario

1 Comentarios

Anónimo dijo…
Aunque es cierto que el proyecto posee un gran impacto sobre el ecosistema la universidad del Tolima no puede ser ajeno a este proceso y menos sus investigadores, por lo que la aceptación de realizar el monitoreo no habla de que este se haga sin el rigor científico que este merece. No podemos esperar a que venga otra universidad a hacerlo, temiendo que éstos den unos resultados sin rigor. Además el estudio es de monitoreo, no de impacto ambiental, para lo cual implica otro proceso posterior. Lo que si critico de la aceptación de este proyecto de monitoreo es el miedo que tiene algunos investigadores de abrir un espacio de discusión frente al mismo, en ese sentido si parecería que hubo compra de conciencia, pero no porque lo sea, si no por el temor que ya mencioné.

más bien la comunidad debe exigir a los grupos que socialicen el proceso y digan abiertamente que posición tienen frente a ello, pero reafirmo que los investigadores no pueden estar ajenos del proceso y menos no participar de ello. O acaso confiamos más en la ética de los investigadores de otras Universidades?